Mis
ojos, sin tus ojos, no son ojos
Mis ojos, sin tus ojos, no son
ojos,
que son dos hormigueros solitarios,
y son mis manos sin las tuyas
varios
intratables espinos a manojos.
No me encuentro los labios sin
tus rojos,
que me llenan de dulces
campanarios,
sin ti mis pensamientos son
calvarios
criando nardos y agostando
hinojos.
No sé qué es de mi oreja sin
tu acento,
ni hacia qué polo yerro sin tu
estrella,
y mi voz sin tu trato se
afemina.
Los olores persigo de tu
viento
y la olvidada imagen de tu
huella,
que en ti principia, amor, y
en mí termina.
Antes del odio
No, no hay cárcel para el
hombre
no podrán atarme, no.
Este mundo de cadenas
me es pequeño y exterior.
¿Quién encierra una sonrisa?
¿Quién amuralla una voz?
A lo lejos tú sintiendo
en tus brazos mi prisión
en tus brazos donde late
la libertad de los dos.
Libre soy, siénteme libre,
solo por amor.
Poeta y dramaturgo
1910. Orihuela
(España) – 1942. Alicante ( España)
Publicó: Nanas
de la cebolla; El soldado y la nieve; Perito en lunas, El rayo que no cesa,
Viento del pueblo, Cancionero y romancero de ausencias;
El hombre acecha;
en teatro: Quien te ha visto y quien te
ve y sombra de lo que eras,. El torero más valiente, Los hijos de la piedra, El
labrador de más aire, .Teatro en la guerra
No hay comentarios.:
Publicar un comentario